Hace ya varios meses que vengo denunciando la absurda identificación que hacen varios sectores de la extrema izquierda e incluso de la socialdemocracia europea del islamismo político, corriente retrógrada y fanática donde las haya, con los movimientos progresistas y descolonizadores, basándose en que esos partidos o grupos islamistas hacen una destacada labor social y se oponen al imperialismo, siempre representado por EEUU y sus aliados, como si fueran los únicos países que juegan sus cartas en Oriente Medio y Ásia Central.
En este simplón y burdo análisis se confunde la realización de una política social desde una ideología progresista de izquierdas con la puesta en práctica de una política asistencial para captar adeptos y adoctrinarlos - es como si esos intelectuales de extrema izquierda dijeran en sus escritos que la iglesia católica es progresista sólo porque ofrece comida gratis en los comedores públicos o ropa en las "hermanitas de los pobres" - y además siempre se omiten o se endulcoran los aspectos más siniestros del islamismo político, como por ejemplo el trato discriminatorio que se le da a la mujer en muchas facetas de la vida diária.
En este sentido, creo que vale la pena mostrar la otra cara del islamismo político. Esa que no aparecerá nunca en los dulzones y glamurosos artículos de "Rebelión", "Socialismo o barbarie" o "Kaos en la red", pues es necesario que la gente de izquierdas sepamos que le estamos haciendo el juego descaradamente a una corriente fanática, retrógrada, alejada del laicismo y de cualquier tipo de visión progresista de la sociedad. Como muestra de mis palabras, os invito a ver este brutal video de la lapidación de varias mujeres en Irán, condenadas por adulterio, en el imprescindible blog "Patría Judía". Añadir que las imágenes son de extrema crueldad y pueden herir la sensibilidad de los espectadores.
No caigamos en el error de hacerle el juego a las corrientes islamistas con el fin de criticar los excesos y errores de la política exterior estadounidense. Seamos críticos con la guerra de Irak o con las violaciones de los derechos humanos que se puedan cometer en Guantánamo, pero sin caer en el error de convertirnos en voceros de los grupos islamistas o de llamar resistentes a tíos que ponen bombas en mercados y que están masacrando al mismo pueblo que dicen defender. No olvidemos que las corrientes islamistas están en las antípodas de los ideales laicos, igualitarios y progresistas que nosotros defendemos.
1 comentario:
Hola, hay veces que me siento una desconocida entre los 'foreros de izquierda'. Repiten viciosos estereotipos antisemitas, con sólo cambiar una palabra 'sionista'. Rebelión tiene el triste record de reproducir material antisemita, como "Los mitos fundacionales del estado de Israel" de Roger Garaudy por el que fue condenado en Francia, o "Lee el Talmud Goyim", y hasta empieza a dar 'credibilidad' a diarios de conocidos criminales de guerras nazi como Adolf Eichmann que negador del Holocausto, el su artículo "El sionismo:Fascismo teocrático". Me espanta pensar en qué esperpentos se han convertido estas personas. Un saludo.
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